¿Es usted un ángel?
Belkis Cuza Malé
Quizás, como aseguran, hay ángeles invisibles
alrededor nuestro, y otros que han venido a la Tierra en misión especial y se
conducen como cualquier ser humano. Pero también están esos otros ángeles que
acampan en número de nueve en los techos de nuestras casas cuando se hace
necesario defendernos de los ataques del Maligno.
No sé si recuerdan que tengo una foto tomada en una
pequeña plaza de la ciudad de Princeton, New Jersey (donde viví muchos años), y
allí aparece a mis espaldas un ángel formado en el agua que brota de una fuente.
No me percaté de esto sino muchos años después revisando mis fotos. Y es
realmente increible.
Y evoco ahora aquella otra experiencia, única,
cuando todavía vivía en Cuba, y vi un querubín vestido de azul. Estaba yo de
visita en casa de mi amigo Joseíto López del Río, un anciano que era todo
espiritualidad, y oraba por mí, imponiendo sus manos sobre mi cabeza, cuando vi
al querubín saltar por la ventana abierta del comedor. Daba salticos como movido
por un resorte de alambre. No creo equivocarme si digo que llevaba un atuendo
especial confeccionado en tul azul. Desapareció con tanta agilidad como
saltaba.
Pero cuando le pregunto si es usted un ángel, lo
hago en sentido figurativo. Es decir: ¿es bueno, hace el bien, ama a sus seres
queridos, respeta y honra a los demás? Sé que no basta con ser bueno, o creerse
bueno, hay que demostrarlo, hay que comportarse como tal, hay que sentir que
somos hijos de Dios, y que Él vive en nosotros y somos su manifestación en este
plano terrenal. Y que Él es nuestro Salvador. Mucha gente piensa que es buena, pero odia, o siente rencor por alguien
que en el pasado le ofendió. Otros son indiferentes, van por el mundo sin
contribuir con sus acciones a eso que llamamos un ser bueno y noble. La bondad
se aprende, y debe practicarse. El amor se aprende y debe ser la fuente de todas
nuestras acciones. Los que no muestran respecto por los suyos, los que desde
muy temprano en la vida no aprenden a dar amor y a recibirlo, no alcanzarán
jamás la madurez espiritual.
Buenos, pero odiadores; buenos, pero rencorosos;
buenos pero capaces de traicionar, de engañar, de decir mentiras. "Yo perdono
pero no olvido", repiten muchos. ¿Los estoy retratando?
Otros se creen buenos pero maltratan a los animales o sencillamente, no saludan
ni al vecino. Los peores son aquellos que llamándose creyentes niegan a Dios
con sus acciones.
Y volviendo al tema de los ángeles: si por causalidad
invoca usted a su ángel de la guarda para que lo saque de un aprieto, recuerde
que es Dios quien lo mantiene ahí a su lado, día y noche, y que como dice el
Evangelio, nadie llega al Padre sino a través del Hijo, de Jesús. Pídale a Él y
deje a su ángel en paz. Sea bueno de corazón, y ore para que no lo pierda el
demonio, para que no le confunda la mente y le haga escoger iniquidad. Aspire a
heredar la vida eterna, viviendo una vida terrenal llena de amor y respeto por
todos, empezando por usted mismo.
Nota: Si necesitan ayuda con sus
problemas, si están deprimidos, faltos de amor, solos, sin trabajo y esperanza, por favor,
comuníquense conmigo a cualquier hora al (786)
975-5709 y oraré con ustedes. Y les daré Palabra de
Profecía. O enviénme un mensaje a BelkisBell@Aol.com. Con
Dios todo es posible.
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mi blog: http://www.belkiscentrodeesperanza.blogspot.com